Los Samadhi del Sábado – El futuro no es inevitable

Los poetas comparten con los artistas la capacidad de salir del mundo percibido como real para permitirnos acceder con palabras o a través de los sentidos a la representación de acontecimientos imposibles de percibir.
 
Formar o colocar palabras frente a la tragedia es una forma de dominar su representación.
 
Víctor Hugo dijo: «Es triste que la naturaleza hable y que los seres humanos no la escuchen»
 
La crisis en la que vivimos le da razón y nos invita a restringir los ataques a la ecología, renunciar a la supuesta superioridad que hemos ejercido sobre el medio ambiente o persistir en el error y rápidamente ir a unirnos con los dinosaurios.
 
Pero además de las transformaciones que tendremos que hacer en nuestros hábitos para vivir mejor sin crecimiento y con mejor distribución, equidad y empatía, nuestra inteligencia tendrá que extenderse en relación con la vida de todas las culturas, especies y oficios para descifrar nuestras ambiguedades.
 
El artista Alfredo Márquez recordó recientemente la soberbia respuesta realizada en 1989 por un brillante y visionario poeta peruano a la pregunta «¿quién eres?», que le planteó la colaboradora de Jorge Luis Borges:
 
«En el mundo, todo de nadas acumuladas (..) Cuan a destiempo llega uno a sí mismo»
 
Esta prueba que arrolla nuestro planeta también nos ofrece la experiencia de «llegar a nosotros mismos» como lo evidencian las muestras de ignorancia, irresponsabilidad, egoísmo, pero también las olas de solidaridad que se despliegan sobre nuestros miedos y soledad.
 

La soledad es una roca
Contra la que arroja el aire
Está en cada pared de la ciudad,
Cómplice, disimulándose.

 
Frente a todos los desgarros que marcan los cuerpos y entran en la psique colectiva, los mecanismos de defensa como la observación, el ensueño y la sublimación son los caminos más seguros para descubrir y construir mundos más amables.
 
(*) «Escrito a ciegas-» Poema de Martin Adán dirigido a Celia Pascero y publicado por Visir, citado en abril de 2020 por Alfredo Márquez – Artista plástico Peruano.